Frikis, reuníos!

El mundo es de los frikis. Todo el mundo lo sabe, pero prefieren ignorarlo y continuar con sus vidas, familias, hipotecas, convencionalismos sociales y lobotomías varias. Ellos disimulan, nos miran de reojo, con recelo. Saben que lo sabemos. Tenemos el control... de nuestras mentes, que ya es pedir mucho.

viernes, 20 de diciembre de 2013

DIARIO DE GUERRA DE UN CROWFUNDING: llegando a la base.

¿Recuerdan la primera escena de Platoon, esa en la que Charlie Sheen llega a la base recién inscrito como voluntario para ir a Vietnam? Pues ese soy yo. Unos días después de iniciar nuestro crowfundin en Indiegogo (http://www.indiegogo.com/projects/instant-dungeon) me siento así, cuando realmente como me gustaría sentirme es como Charlie Sheen en Dos Hombres y Medio.

Si amigos, hay una gran diferencia entre esto...

Y esto...

La primera foto es cómo piensas que va a ir todo y la segunda es como estás cuando te das cuenta de que solo has empezado.

Y es que esto del crowfunding es nuevo para mi. Cuando digo para mi es literal. Soy empresario, escritor, columnista, presentador televisivo, conferenciante, entrenador personal, semi-couch, tarotista, jugador de rol, de Mechwarrior, friki en general y hasta he sido fotógrafo pero nada de todo esto vale cuando se unen tres vectores : nuevas tecnologías, nuevas formas de negocio y frikis. ¿Porqué? Porque hay tantos vectores marchando como flechas hacia posiciones distintas que es imposible vislumbrar nada. Por eso escribo esto: un diario de guerra, no a lo Punisher, sino simplemente a lo "novato", a lo Charlie Sheen en Platoon.

Pero siempre hay un previo, un punto de partida. El nuestro (digo nuestro porque en mi pelotón hay tres tipos más, de los que hablaré en próximas entregas) comienza en un Mcdonalds de Madrid un lluvioso día de mediados de Octubre. Allí sentamos las bases de lo que es nuestro asunto, y hasta le ponemos nombre. Instant Dungeon. Me trabuco y digo que tenemos que meter "táctical" en el nombre porque somos la única escenografía que va a poder compatibilizar cualquier mapa de rol que contenga pasillos de una pulgada. Todo el mundo asiente y se nos ponen las gónadas como dos tetrabricks: parece que hemos descubierto el agua templada. Tanto es así que tenemos miedo de que alguien nos escuche y nos robe la idea, así que nOs ponemos a hablar bajito. A fin de cuentas estamos en el triángulo friki de Madrid, en la Calle Gran Vía, en la mayor acumulación de tiendas frikoides de la capital madrileña.

Emocionados nos damos un plazo (atención) de 34 días para tenerlo todo. Y digo 34 porque cedimos, que queríamos hacerlo en menos de 30. Que emoción. En hora y media, hamburguesas a un euro mediante, tenemos casi todo para empezar. Logo, muros, posibles diseños, hasta apuntes de costes y diferenciales. Y reparto de beneficios para cada uno de los miembros. Y nos vamos marchamos. Esa hora y media es ficticia. En realidad pasan las horas hablando de todo esto y acabo a las doce y media en casa cuando nos habíamos despedido a las nueve y media. Somos guays.

A la una menos cuarto, Juan, nuestro escultor, nos envía por wassap las primeras paredes ya hechas. Lo flipamos todos. Ya hasta 34 días nos parece mucho tiempo. Estamos emocionados. Me acuesto con una sonrisa y medito todo esto lo justo, como suelo hacer a menudo.

Con el crowfundin en marcha, dos meses después de aquella reunión, sigo meditando lo justo, no para evitar atorarme, si no para permanecer "alejado" de nuestro proyecto.... Pero eso será otra historia.

En el próximo episodio de Diario de Guerra de un Crowfundin conoceran ustedes a los miembros de este pelotón, se descubrirán los secretos de los crowfundings de éxito (todos aquellos que ustedes saben), y verán como en esta guerra lo más fácil es perder los nervios.

Ah, y en el próximo episodio...HABLAREMOS DE HEROQUEST 25th ANIVERSARIO

Pili, la Dungeon Master de este grupo de rol, ha decidido participar en nuestro crowfundin, harta de jugar con cartoncitos. Gracias chicas, vosotras si que lo teneis claro.

 

domingo, 15 de diciembre de 2013

Crónica de la Pathfinder Society Madrileña: un hamster, un tigre y un muerto muy vivo.

Se acaba 2013 y en vista de que los Mayas siguen sin acertar, qué mejor manera de superar ese trauma que juntarnos a hacer el friki en Generaciön X de la calle Puebla. Así que allá fuimos con la esperanza de gloria, honores y monedas de oro a raudales. Y así fue.

Mañana fría de pelotas, tres mesas componían el turno mañanero y una, la de los elegidos para la gloria, el de la tarde: nos jugábamos el honor de completar el cuarto nivel de Thornkeep...

Por la mañana estaba apuntado a la partida que dirigía Nagash, que por la tarde llevaría en la mesa de juego a Lady Scar. Compartía mesa con clásicos de estos eventos: Jaime con su clérigo -y que a la postre resultaría decisivo-, David "el turruncún" con Golosina, un halfling puñetero y Ricardo "kelven" con un pregen ninja level 4. Yo vestía la vida de Gerald "hellhound" Willow.

Partida con cierto nivel de politiqueo y movidas raras: teníamos que ir a conseguir unos informes sobre las protecciones de la zona de la Herida del Mundo, una brecha interdimensional por donde se cuelan los bichos de otros mundos. Demonios, hablando claro. El tema es que aparte que este sitio está a tomar por saco de lejos, hace un frío de cagarse. Pues ná, que llegamos y nos ponen en contacto con un militar de esos que cuando nacieron ya llevaba el uniforme puesto. Estirao, un poco gilipollas y con horchata en las venas en vez de sangre, el tipo nos dice que han desaparecido algunos hombres suyos y que tenemos que informar y centrarnos en la misión. Pues fale.

Primer encuentro del día: nosotros al fondo y los malos aporreando a unos tipos en el suelo. ¿Veis unos pintarrajos? Pues eso era tierra firme y lo demás agua. Más explicaciones a continuación.

El problema es que por el camino hacia los puestos avanzados vemos a unos tipos al lado de un río que están matando a otros. Decidimos salvarlos, pero el militar este dice que el pasa, que la misión es la misión. A mi me la bufa, Gerald es caótico neutral, pero cuando mis amigos deciden ayudarlos no pienso dejarles solos, así que con mirada de odio incluída hacia el militar de marras y tras un brillante y algo tortuoso combate (había que cruzar un rio que cubría) quedamos como los campeones Pathfinder que somos.

¿Qué sucede cuando intentas sacar una foto en la que, además quieres salir tu? Pues que sale mal.

He de decir que si algo caracterizó el día es que anduvimos un poquito en la parra. Buen ejemplo de ello es después de este encuentro, por ejemplo, se nos olvidó registrar los cadáveres. Como si fuéramos novatos.

Pues eso, que llegamos al campamento militar y decidimos ir a buscar a los soldados desaparecidos. Para ello teníamos que entrar en La Herida del Mundo. Y eso hicimos. Y festival de tripis. Aquello de andar por el tejido conectivo de la realidad es chungo, algo así como estar informado viendo a Ana Rosa Quintana. Y si la zona esa era un flipe (hacía un calor de giñarse, por ejemplo) no te digo nada explorarla acompañados de nuestro militar tocapelotas favorito.

No tardaron en pasar cosas jodidas. La más chunga era un polvo en el aire que nos hizo tirar veinte veces salvaciones porque nos asfixiaba y además nos entraban ganas de matar a nuestros colegas. Yo casi me ahogo, pero lo peor es que el polvo se hizo conmigo, con el peligro de atacar a mis compañeros. Y es que si les doy un meneo me los bajo. Afortunadamente fallé todo, incluída la conversión asesina y no ataqué a nadie. El clérigo me puso un pañuelo en la cara y pude empezar a respirar mejor.

Tras un ataque de unas abejas asesinas que resolvimos con más trompicones de los debidos, nos enfrentamos al final de la aventura: encontramos a los desaparecidos, pero tenemos dos problemas. El primero es que " a mano izquierda" viene una horda de demonios bestial y a la derecha tenemos a los cautivos con un demonio del tamaño de una casa y otros dos pequeñitos que comienzan a matar a los rehenes. Estábamos pensando entre irnos, luchar o hacernos caquita cuando el militar carga contra la horda demoníaca al grito de "salvarlos mientras yo los entretengo!". Mira, nos faltó tiempo para salir por patas a rescatar a los rehenes. El demonio era chungo, la verdad, y yo que era el que más metía fallé demasiado pero tácticamente nos movimos bien, siempre cubiertos por el clérigo que nos curaba rápidamente mientras el halfling protegía a los rehenes y acababa con los de onios pequeñitos. Salimos de allí como alma que lleva el diablo y aunque perdimos algún punto de facción y monedas de oro, salvamos el pellejo y el sacrifio de nuestro militar estirao no fue en balde.

Estupenda partida, no el clásico mata/saja/raja/saquea, muy bien dirigida por Nagash y suficiente experiencia en la mesa como para que, salvo algunos momentos, sintiéramos el vaho de la muerte en nuestras caras...

Comida en el mierdonalds, comentarios varios sobre Peter Jackson y El Hobbit versión libre y...

THORNKEEP LEVEL 4

Bueno, la mesa era para que se nos saltaran las lágrimas. No sé como no pasó gente de la calle a pedirnos autógrafos.

Dirigía Miguel "metrónomo" Puck, garantía de acabar en algún momento antes de las diez de la noche del día siguiente. El resto, los jugadores eran -ahí es ná- Alberto Mejías con su guerrero Berneth, un tipo que tira dos dados de cuatro y suma treinta y tantos al daño, Nagash y Lady Scar, la bruja de Cheliax lanza bombas más chetizada de todo Golarion, Ricardo y su Keldorn, un enano con 29 de chapa, Miguelón y su mítica barda hamarita con su látigo de Mithril, Pedro con un clérigo pregen de nivel 7 (y que como sucedió en otro evento Pathfinder fue ayuda decisiva para Maricielo), y con su nivel 8 recién estrenado la susodicha elfa, una picadora moulinex en modo batir claras.

El escenario era muy muy chulo. Básicamente este nivel 4 era algo así como la peli esa del día de la marmota; un caos temporal en el que pasaban una y otra vez las mismas cosas. (No sé porqué pero tuve la sensación de que nos íbamos a soplar el escenario si comerlo ni beberlo y cuando vi las moviditas estas me reafirmé...Que equivocado estaba)

Empezamos sin problemas, que si unas estatuas que si unas tontunas relacionadas con unos magos (3 magos 3) que ya nos habían contado antes. Nos la bufó bastante. Luego aparece un bicho gordo. Pero gordo gordo. Nos lo había descrito un tipo, un Pathfinder, antes de entrar en el nivel 4 y nos dijo que aunque le mataban y le mataban siempre revivía y que se había comido a su grupo. El bicho era este:

 

Le dimos con todo, nos pega un poco pero nada que no pueda reparar la clériga Kira (sacaba ochos contínuos en sus d8 de la varita de curar :-0). El tema es que cuando le vamos a matar, zas!, desaparece. Y detrás del bicho, en la sala, aparte el tio de la Pathfinder con el que hemos hablado antes y que no nos conoce... Parce ser que hay una movida temporal, una paradoja y estamos todos en ella. Descubrimos que las piedras Ioun que porta este tipo y que nos había dado una antes de entrar en Thornkeep (que yo me agencié nada más verla y coloqué en mi Wayfinder..) interactúa CON LA QUE LLEVA EN ESE MOMENTO DE LA OTRA REALIDAD. Si, os acaban de convalidar primero de Físicas...

En fin, que sabiendo todo eso, lo hicimos de tal manera que intentáramos cerrar parte de ese bucle temporal liberando así al pringao Pathfinder ese. Claro, al hacerlo uno de los magos del tinglao se apodera de él y queda liberado... Mieeeeeeeen....

Vaya tela. Seguimos explorando, Maricielo abre todo, percibe todo y lo que no lo sacan los demás. Y llegamos a una habitación. Saco un 23 a Disable Device para abrir la puerta y Berneth insiste sacando poco más. La cerradura cede y salen... Bueno, mejor dicho, salimos nosotros de esa habitación, pero muchos más viejos...la verdad es que no nos coscamos de la importancia del hecho, y tiramos una salvaciön de Will que sacamos todos menos el enano. Bueno, pensamos que no pasa nada hasta que Puck nos dice que son unos puñeteros fantasmas de nosotros mismos Y QUE SI EL ENANO VUELVE A FALLAR MUERE. Vaya tela. Necesita una tirada de +5 al dado... Y va y saca un tres. Y SE MUERE.

El enano muerto y los demás con el culo torcido. En la foto dos elementos no colocados aposta resumen la imagen: terror en el centro comercial y cleenex para las lágrimas.

Ricardo se queda destrozado, los demás le pillamos todo el equipo. Si amigos, así es la vida del jugador del rol. Nooooo... Bueno si, le looteamos, pero también miramos como hacerle para revivir: se contaron sus puntos de prestigio en la Sociedad Pathfinder y con eso, oro, petición de unos pergaminos y demás, el enano volvió a la vida después de sacar su cadáver desnudo del Thornkeep.

Con el enano revivido y Ricardo acojonado volvemos al dungeon y a la sala de las narices. Y al entrar nos encontramos con una biblioteca, un mago magísimo y su mascota, un tigre enorme y sin piel y el tipo nos echa una chapa que pa qué. Que si le rescatamos, que si tal y que si Pascual. El problema es que va y dice "...y así, si me ayudais, me convertiré en un rey no muerto...". Ni que decir tiene que tiramos todos iniciativas...

El mago y el tigre. La que se va a armar.

 

Y aquí viene otro de los momentazos de la jornada. Lady Scar, chetizada al máximo y con ardor de estómago por las potis ingeridas (ver a continuación)

Se bebió hasta el agua de un florero que había allí...

Decide hacer uno de sus "ataques nucleares" y le suelta TODO. T O D O. 120 de daño. Hasta grabamos un vídeo, tan felices. ¿Pero que pasa? Pues que el mago tiene resistencia al fuego. Daño total: 15. Si amiguitos, habeis leído bien. Y va el mago, se descojona y LA CONVIERTE EN HAMSTER. Claro Nagash, es lo que tiene que tu Lady scar brille tanto: que las polillas van a ella.

Hundido en el fango moral mientras cantábamos el "tu hamster" del Reno Renardo, decidimos que hay que darle la del pulpo. Primero va Maricielo, le meto 40 de daño, fallo el siguiente pero le vuelvo a acertar y le caen otros 28. Los demás le dan duro y cae, pero me engancha el tigre, que parecía que estaba allí de atrezzo (pero no) y me hace 58 de daño de 60 de vida que tengo. Dioses, a Maricielo se le tuerce el culo. Y aquí sale lo mejor de todos: La Kira de Pedro me hace un curar máximo de esos de 56 y antes del turno del tigre Hamarita le mete un Atontar y yo, más cabreada que una mona, le critiqueo y le meto 60 de daño y va el enano revivido y le critiquea también...Buf.

La hora se nos echa encima y nos saltamos un encuentro menor. Conseguimos bastantes cosas, a pesar de que las bombas de fuego de Lady Scar consumieron buena parte de la biblioteca... 8.000 monedas de oro, que me van a financiar una Dusty Rose y alguna chorrada para pone guapa a la Mari.

Estupenda jornada, estupendas mesas y nivelazo de jugones. Que placer señores, que placer. El año que viene MÁS.

Así terminaron la clériga y Maricielo. Love is in the dungeon!

 

( Una cosita más. A estas horas de la noche acabamos de colgar en la red nuestro primer crowfunding rolero. Se llama Instant Dungeon, y me vais a permitir que os lo presente oficialmente:

http://www.indiegogo.com/projects/instant-dungeon

Somos cuatro frikis que intentamos que nuestro proyecto salga adelante y que las mesas de rol tengan una herramienta más para hacernos más felices si cabe. En unos días iré haciendo un "diario de guerra" en este blog sobre como marcha el asunto.

Gracias a todos porque sé que estareis ahí.

Enrique Freire.)

 

miércoles, 11 de diciembre de 2013

Pathfinder Society de Madrid: el evento final 2013.

Pues si, se acaba el año y la Society madrileña se despide hasta el año que viene. Otra vez más, Generación X de la calle Puebla, en ese animado sitio madrileño que es el centro, nos cede el local para una jornada más de emoción, honor y gloria a raudales.

En la sesión de mañana partidas varias y por la tarde Thornkeep level four, con la participación del que suscribe y el resto de compañeros del club Derribos Cheliax.

Creo que aún se puede uno apuntar y si no pasaros por allí a ver como va el tema. Os reiréis de fijo.

Quítate el uniforme de trabajo y vente a pasarlo bien a la Sociedad de Exploradores.

 

 

domingo, 8 de diciembre de 2013

NUMENERA, lo nuevo de Monte Cook: un billón de años después seguimos dando la brasa en el planeta.

En otro arranque friki el otro día me pillé este jueguito. Tocho como dios manda, Numenera es lo último de Monte Cook, el tipo que se piró del grupo de diseño de D&D Next y que se metió en un crowfunding para sacar esto.

Ahora es cuando debería hablar de que si no le hacía falta hacer el crowfunding, que si eso es para "noveles" no para "empresarios" de la talla del Cook, que si el mecenazgo tachín, que si el mecenazgo tachán, pero después de lo del Heroquest 25th Aniversario y en vistas de que en nada estoy yo metido en uno, y ya dentro en otro de manera colateral, lo voy a dejar correr.

Numenera es ciencia ficción desoladora, hipertecnificada y medieval todo en uno. Cook supone que dentro de un billón de años seguimos (por decirlo de alguna manera) pisando este planeta y que ha habido nueve intentos anteriores que o han desparecido o se han pirado de aquí (salvo el ayuntamiento de Madrid, que sigue pagando deuda). Total que a la novena las cosas están como están: se ha mezclado todo, la basura con el genoma, la naturaleza con la tecnología, los bichos con los chips, los continentes se han movido, los bosques son una mezcla informe de todo a un tiempo y la gente pues está por allí porque tiene que haber de todo.

Por supuesto, hay unos cuantos emprendedores que buscan artefactos chachis de otros épocas para ser mas guays en sus comunidades y que son básicamente a los que nosotros representaremos en el juego.

Las resonancias literarias de todo esto son muy amplias. Algunas aparecen en el libro, pero a mi me resuenan dos que no cita el Cook:

Una es Generación Alien, esa serie que ya me ha convencido absolutamente (skeptics sucks) y sus referencias a tecnologías perdidas

Y la segunda a un libro que leí hace tiempo, que me pareció buenísimo y que habla de todos los "comienzos" que vuelve a tener la tierra gracias a un grupo de humanos que, salvados antes de un armagedón meteorítico, viven en la luna y que cada vez que mueren son regenerados con sus secuencias de ADN... Una especie de jardineros de humanidades. Me refiero a "Terraformar la Tierra" de Jack Williamson, el tipo que inventó el término terraformar.

 

Las chicas en Numenera van desde este ejemplo...

 

El sistema es un D20 contra un nivel al que se multiplica por tres y te da el número a batir. Bajas esa dificultad en función de tus especializaciones... y el combate casi igual. Poco más, amigos. Eso si, puedes hacerte tipos de personajes como para alicatar Marina D'or y todas las estadísticas te van a quedar muy bonitas, porque la hoja de personaje es una delicia.

Tienes chorradas mil para buscar por la Tierra del siglo un millón, un caldo de movidas y artefactos que da el nombre de Numenera al juego, acompañado de un buen montón de criaturas diseñadas en las raves más chungas de Alcorcón.

... A este otro...

 

Monte Cook asegura que quiere dar un toque más narrativo a los juegos de rol con este Numenera. (¿Cuántas veces habré oído yo eso?) y lo busca entre algún apunte, con lo que denomina "GM intrusion", osea que el Dungeon Master mete el hocico y te putea con tal de que la cosa se anime. Pues me parece bien.

Para terminar decir que el libro es muy bonito, jodidamente bonito, y que a pesar de que las ilustraciones pecan de ser un tanto desiguales en calidad están bastante "empaquetadas" con la idea y ambientación del juego. Hay algunas que son de cagarse la perra.

 

...o a éste. Bueno, más o menos, no seáis puntillosos, leñe.

 

El libro lo pillé en inglés, pero me acabo de enterar en la comunidad del facebook del juego "numenera en español" que puede que se edite en castellano...Estupendo.... Como decía mi abuela "el que no se contenta es porque no quiere" me he planteado tener este tocho en inglés como si me apuntara a un curso del Vaughan ese.

Se me olvidaba una cosita: en el libro y en el trasfondo no se "ve" ningun artefacto de nuestro presente, pero si de las civilizaciones que se han ido superponiendo a la nuestra. Y no parece que ninguna de ellas mejore lo presente. Exactamente lo que me imaginaba: esto no es un planeta, es un váter.